Con 145 mil m² de construcción, el emprendimiento está compuesto por un centro comercial y un hotel 6 estrellas con 122 habitaciones, además de la restauración de una capilla existente en el local. El edificio impresiona por su tamaño y se destaca por incluir la preservación de un patrimonio histórico, además de la superación de diversos desafíos en el área de la ingeniería.
Uno de los aspectos más destacados de este icono de la construcción es el revestimiento exterior, que cuenta con brises de madera y vegetación natural. El sistema de brises será soportado por la estructura del edificio, con la ayuda de vástagos roscados fijados al hormigón con el Anclaje Químico WQI 44 de Walsywa.
La resina a base de viniléster de curado rápido y alta resistencia fue elegida porque los anclajes químicos no crean tensiones en el hormigón, debido a la forma de acción de estos productos. Esta característica es muy valiosa para la fijación de los brises que componen la fachada del edificio, ya que estarán muy cerca de los bordes del hormigón.
Con el objetivo de certificar la eficiencia y la seguridad del producto, se realizaron pruebas de tracción en los espárragos aplicados y todos fueron aprobados.
